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MADUREZ Y CAMBIO EN AQUELLO QUE SE BUSCA Y VALORA. TEORÍA DE LA SELECTIVIDAD SOCIOEMOCIONAL

Las preferencias de las personas, aquello a lo que dan mayor o menor importancia, cambia conforme estas van avanzando en edad. El que un hombre o mujer de mediana edad tengan intereses diferentes a los que tenían en su adolescencia y a los que tendrán en su vejez es algo normal y asumido por casi cualquiera. Pero, además, según la Teoría de la Selectividad Socioemocional, existe una tendencia del ser humano, en general, a ir modificando los objetivos a los que se presta mayor atención.  Igualmente, parece que también cambia la relación entre la atención que se presta a estímulos que son valorados como positivos y negativos. En otras palabras, los seres humanos tendemos a cambiar lo que buscamos  y, además, nuestra percepción de lo que vamos alcanzando.

Según la teoría señalada, los adultos se mueven entre diferentes tipos de objetivos;  destacando los relacionados con la obtención de información  y expansión de horizontes, por un lado, y los que tienen más que ver con la gratificación emocional, por otro. Al respecto, las  personas que estiman que aún tienen mucho por vivir, normalmente hombres y mujeres jóvenes, se centran más en aquellos objetivos que tienen que ver con los del primer tipo. Mientras, los que perciben que su tiempo de vida es más corto, habitualmente gente mayor, se focalizan más en los del segundo tipo.  Además, los mayores se centran más en las experiencias positivas, priorizando las actividades que aportan estas sobre las que tiene un valor relacionado en  gran media con el logro personal y la exploración; denominándose a esto último efecto positivo (Stanford. Life-Span Development Laboratory, n.d).

Con la intención de comprobar las hipótesis que marca la teoría nombrada, Ji, Peng & Xue (2017) llevaron a cabo un experimento en el que a 85 participantes, 49 con una edad que oscilaba entre los 56 y 72 años  y 36 con edades que iban de los 20 a los 28 años, se les pidió que, durante 14 días, registraran diariamente  tres eventos que les hubieran hecho sentir felices o infelices. Solicitándoles, además, que valoraran cada uno de ellos según su grado de positividad en una escala del 1 al 5. Después, los eventos fueron clasificados por los investigadores en categorías según el tipo de objetivos con el que se relacionaban y del valor dado. 

Los resultados obtenidos indicaron que las personas de más edad registraron en un numero significativamente mayor situaciones que tenían que ver con objetivos relacionados con las emociones. Entendiéndose a estos como aquellos tenían que ver con diferentes tipos de experiencias que incluían  la vivencia y regulación de emociones en uno mismo y el sentir a estas en los otros durante las interacciones sociales. Mientras que los jóvenes se decantaron por los objetivos relacionados con la adquisición de conocimientos. Además, en cuanto a la valoración, el grupo de mayor edad señaló a muchos más eventos dentro de lo que fue codificado por los investigadores como positivo que lo que hizo los de menor edad.

El experimento señalado, a la luz de los resultados que ofrece, apoya las hipótesis de Teoría de la Selectividad Socioemocional , tanto en lo que se refiere a los objetivos que más importancia tienen en las personas según su edad y, además, en lo que concierne al conocido como efecto positivo o tendencia a prestar mayor atención a lo experimentado de manera positiva. Esto parece señalar que las personas tendemos a buscar un acercamiento cada vez mayor en nuestras vidas a situaciones y personas que realmente nos resultan significativas; que nos hacen sentir y compartir emociones importantes. A la vez, nos dice que en la juventud esto suele quedar en un segundo plano y que, en esta, es preferido aquello que tiene que ver la mejora del conocimiento y amplitud de las oportunidades de crecimiento en ámbitos como el profesional, educativo, deportivo, etc. Añadiéndose a todo esto la mayor capacidad, conforme se aumente en edad, a percibir aquello que se entiende como positivo y que, por tanto, conlleva un valor emocional importante.

 

Lista de referencias.

 

Ji, L., Peng, H., Xue, X. (2017). Age Differences in the Experience of Daily Life Events: A Study Base don the Social Goals Perspective. Frontiers in Psychology. 8: 1623. doi: 10.3389/fpsyg.2017.01623

 

Stanford. Life-Span Development Laboratory.  (n.d). Recuperado de: https://lifespan.stanford.edu/projects/sample-research-project-three

 

Autor: Juan Antonio Alonso